El climax viene después
No necesitas caminar durante horas para disfrutar de unas impresionantes vistas de Las Ubiñas.
Tampoco para escuchar el sonido del agua en plena naturaleza.
Ni siquiera para visitar bosques de hayedos en pleno otoño.
Hoy en día, puedes alcanzar todo eso sin esfuerzo.
Si eres de esos que van a todo en coche, nada que recriminar.
Ahora bien, te voy a compartir un momento.
Uno.
Si lo has vivido, enhorabuena, es de las mejores sensaciones que se pueden tener.
Si te suena a marciano, presta atención, porque lo mismo te interesa.
Para llegar a ese momento tienes que seguir tres pasos que son indivisibles.
Atento que son solo tres.
No cinco ni diez. Tres:
1) Haz una ruta que te deje las piernas temblando. Cada uno a su nivel, pero que cueste.
2) Una vez en casa, ducha caliente (o fría si haces Wim Hof) y pijama de otoño-invierno.
3) Siéntate en tu lado del sillón (todos tenemos uno) con tu bebida favorita y mirando de reojo el banquete que te espera.
Ahí, en ese justo momento, surge la magia.
Una mezcla de orgullo, satisfacción, endorfinas, alegría y cansancio te desbordan en ese sillón donde muchos días no experimentas nada.
Esa extraña combinación solo se alcanza cuando has conseguido algo que te ha costado mucho.
Por eso es importante el primer paso.
Bien.
Si hace mucho que no experimentas algo por primera vez, tengo una ruta que te puede ayudar.
Para los que ya sabéis de que va la cosa, podéis ir pensando en el banquete, porque la ruta es la misma.
Está aquí abajo.
Especificaciones de la ruta
- Fecha de realización: 01/10/23
- Longitud: 15,83 km
- Desnivel: 1305 m
- Tipo de ruta: circular
- Tiempo: 7-8 horas
- Dificultad: Super Saiyan
- Niños: sí, acostumbrados a caminar
- Perros: sí
¿Dónde estamos?
En el concejo de Quirós, al sur de la provincia asturiana.
Concretamente en el Parque Natural Las Ubiñas – La Mesa.
¿De dónde salimos?
Desde la iglesia del pueblo de Lindes.
Hay bastante sitio para aparcar.
Descripción del recorrido
Sal del pueblo en dirección sur hasta un poste informativo.
Toma el camino de la derecha mientras empiezas a ganar altura hasta llegar a un impresionante hayedo.
Continúa ascendiendo hasta la Veiga de Manin, donde encontrarás una caseta y una fuente.
Desvíate a la derecha para dirigirte a la base de Peña Rueda.
Una vez allí, sigue los hitos que te llevarán en zigzag hasta su cresta, y más adelante hasta la cima.
Las vistas de las Ubiñas y Los Huertos del Diablo son impresionantes.
Desciende por una inclinada senda de piedra suelta hasta alcanzar una zona más herbosa.
Desde ahí continúa esquivando la baja vegetación para llegar a un pequeño grupo de cabañas llamadas La Cardosina.
Sigue bajando hasta llegar al río de la Foz Grande.
A partir de aquí el camino te obligará a cruzar el río en varias ocasiones, pero hay buenos pasos.
En breves alcanzarás otro precioso hayedo.
En un momento puntual te tocará afrontar un pequeño repecho, pero el resto del camino será en bajada.
Más adelante terminará el bosque y llegarás a un sendero que desemboca en una bifurcación, la cual te marca el camino hacia Lindes.
Sigue el caleyo para llegar a la iglesia del inicio y prepárate para el momento mágico.
¿Merece la pena?
La ruta tiene montañas, bosques y ríos.
Es circular, lo cual siempre embellece el recorrido, ya que la sensación de exploración es constante.
Y por último, tienes unas vistas impresionantes tanto de Las Ubiñas cómo de Los Huertos del Diablo.
Si encuentras algo mejor, dímelo en comentarios.
Mientras tanto, te dejo el track:
Para esos que les gusta ver todo desde el sofá, también hay un vídeo:
Por último, tengo una newsletter. En ella doy consejos muy útiles para que las primeras
veces sean seguras. Es aquí.